Nombre científico o latino: Prunus doméstica.
Nombre común o vulgar: ciruelo .
Planta caduca de la familia de las Rosáceas. El ciruelo es un árbol de deliciosos frutos y extrema belleza. Existen muchas variedades, algunos superan los cinco metros de altura. Tiene un tronco recto marrón oscuro, ramas abiertas y erguidas formando una copa esférica, raíces poco profundas. Sus hojas pequeñas, de color verde oscuro, tienen forma ovalada y con el borde aserrado. Posee flores pequeñas de cinco pétalos, individuales o agrupadas en racimos. En otoño las hojas del ciruelo se tornan de colores rojos oscuros y en primavera las pequeñas flores, que salen antes que las hojas, pintan la copa de tonos blancos o rosados aportando un maravilloso paisaje a jardines o a huertas y granjas donde se los ve en cantidades. Las ramas finas y los frutos son frágiles a los vientos. Ciruela se le llama al sabroso y jugoso fruto de este árbol, que madura en el verano y hay distintas variedades: amarillas, rojas y amarillas por dentro o rojas por dentro y fuera (remolacha). Tienen alto contenido en vitaminas, minerales y fibra. El hueso del centro de la ciruela posee en su interior una almendra que no se debe comer nunca porque contiene un ácido venenoso. Es un frutal rústico y fácil de cultivar, prefiere climas templados pero resiste bajas temperaturas. Su floración es resistente a heladas, sin embargo, sufren con algunas heladas primaverales en algunas exposiciones. Cuando está finalizando el otoño es el mejor momento para plantar un ciruelo que se compra en viveros, también se puede multiplicar por semilla, por vástagos o por injerto. Esta planta se desarrolla hasta en suelos calizos y pobres, siempre que se riegue, pero si se desean buenos frutos se debe ofrecer un suelo rico en nutrientes. El ciruelo puede vivir en terrenos poco profundos con suelos frescos y con humedad pero sin exceso. No debe faltarle el agua en verano
Tomas realizadas con Nikon D7000, Tokina 12-24 y Nikkor Micro 105, AF 2,8
Localizacion: Ardales (Málaga)
Nombre común o vulgar: ciruelo .
Planta caduca de la familia de las Rosáceas. El ciruelo es un árbol de deliciosos frutos y extrema belleza. Existen muchas variedades, algunos superan los cinco metros de altura. Tiene un tronco recto marrón oscuro, ramas abiertas y erguidas formando una copa esférica, raíces poco profundas. Sus hojas pequeñas, de color verde oscuro, tienen forma ovalada y con el borde aserrado. Posee flores pequeñas de cinco pétalos, individuales o agrupadas en racimos. En otoño las hojas del ciruelo se tornan de colores rojos oscuros y en primavera las pequeñas flores, que salen antes que las hojas, pintan la copa de tonos blancos o rosados aportando un maravilloso paisaje a jardines o a huertas y granjas donde se los ve en cantidades. Las ramas finas y los frutos son frágiles a los vientos. Ciruela se le llama al sabroso y jugoso fruto de este árbol, que madura en el verano y hay distintas variedades: amarillas, rojas y amarillas por dentro o rojas por dentro y fuera (remolacha). Tienen alto contenido en vitaminas, minerales y fibra. El hueso del centro de la ciruela posee en su interior una almendra que no se debe comer nunca porque contiene un ácido venenoso. Es un frutal rústico y fácil de cultivar, prefiere climas templados pero resiste bajas temperaturas. Su floración es resistente a heladas, sin embargo, sufren con algunas heladas primaverales en algunas exposiciones. Cuando está finalizando el otoño es el mejor momento para plantar un ciruelo que se compra en viveros, también se puede multiplicar por semilla, por vástagos o por injerto. Esta planta se desarrolla hasta en suelos calizos y pobres, siempre que se riegue, pero si se desean buenos frutos se debe ofrecer un suelo rico en nutrientes. El ciruelo puede vivir en terrenos poco profundos con suelos frescos y con humedad pero sin exceso. No debe faltarle el agua en verano
Tomas realizadas con Nikon D7000, Tokina 12-24 y Nikkor Micro 105, AF 2,8
Localizacion: Ardales (Málaga)
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